Las Mujeres y La Lucha

Para la mujer, adoptar las armas no es algo que carezca de importancia. En el mundo del Medievo Oscuro, el adiestramiento de una mujer (en casi todos los casos).

Arnoul todavía no estaba preparado para responder consistentemente al humillante grito de “Adkyn”, y por eso se sobresaltó cuando una fuerte mano sobre su hombro derecho le hizo darse la vuelta de golpe. Todavía se sorprendió más cuando se encontró enfrente de una mujer que debía pesar lo mismo que él y vestía una armadura de gran calidad bajo una capa ricamente bordada.

¿Eres el nuevo, Adkyn? -preguntó con una voz tosca pero agradable. El asintió-. Fulke me llama Judith. En ocasiones trabajamos juntos. Viajaras conmigo durante los próximos días… he sido contratada para escoltar a una rica prometida y he pedido prestados cuatro hombres de Fulke. Se oyó un fuerte grito procedente de detrás.

¡Judith! – gritó uno de sus jóvenes criados, mientras se lanzaba hacia ella. Arnoul se sorprendió al ver cómo los ojos de Judith se entrecerraban ligeramente, y el muchacho cayó abruptamente al suelo, como si hubiera sido golpeado por una fuerza invisible. Se levantó y empezó a reírse, como si fuera un cachorro que hubiera sido derrotado por un compañero de camada, pero Arnoul se sintió molesto por el imprevisto uso de poder de la mujer.

Eso no ha sido caballeroso -dijo.

Ella se encogió de hombros ante la crítica:

No pienses que esto significa que no se bien como utilizar mi espada y mis puños. Puedo decir que no has recibido demasiada instrucción, pero si tienes suerte, tendremos un viaje aburrido y dispondré de alga de tiempo para enseñarte una a dos cosas.

No estoy seguro de que quiera aprender ese tipo de… trucos – se obliga a decir Arnoul -. Quiero derrotar limpiamente a mis adversarios, sin engaños ni una ventaja injusta. Se miraron fijamente a los ojos.

Mientras estés bajo mis ordenes, derrotaras a tus adversarios con cualquier media del que dispongas, sea cual sea el que te haya dicho. Quizás aprendas algo, y quizás no, pero todos nosotros sobreviviremos. Mientras se alejaba de él, Arnoul pensó en lo poco dispuesto que había estado a practicar su aumentada fuerza y velocidad contra otros caballeros, incluso contra aquellos que sabía que tenían la Maldición. Pero pensó que podría aprender si esta mujer y Fulke deseaban enseñarle. Sin embargo, no estaba tan seguro de ser capaz de utilizar estas técnicas solo en las causas justas y que obrar de otro modo violaría el código que le había cautivado. Tras decidir que aprendería los misterios de sus poderes, pero se reprimiría de utilizarlos en todo momento, siguió a la desconcertante Judith.

Para la mujer, adoptar las armas no es algo que carezca de importancia. En el mundo del Medievo Oscuro, el adiestramiento de una mujer (en casi todos los casos) le enseña a no golpear, a no devolver un ataque, a no proyectar autoridad ni confianza, a utilizar las palabras como armas, pero también a disculparse por demostrar mas habilidad o mas inteligencia que aquellos que la rodean, a dar por sentado que será protegida por uno de los hombres están cerca de ella y a ser sumisa con el.

Nos guste o no, nuestra temprana socialización nos moldea al nivel mas profundo del subconsciente, y superarlo es una tarea agotadora. Dicho esfuerzo resulta todavía mas complicado cuando la sabiduría popular que prevalece es que aquello que intentas alcanzar existe solo en algunas figuras míticas o que tu rebeldía contra tu status quo es una señal de posesión diabólica. Afortunadamente, la mujer luchadora tiene mas posibilidades de encontrar mas aceptación y una hostilidad menos abierta entre los Cainitas que entre los mortales.

Un jugador que interprete a una mujer luchadora tiene que pensar largo y tendido como aprendió a luchar exactamente. Entre los temas que debe dejar resueltos se incluye: ¿Quien le enseño y porque? ¿Donde consiguió su primera arma? ¿Contra quien entrena? ¿Cual ha sido la reacción de su familia ante este insólito comportamiento? Lo mas importante de todo, ¿que significa para ella ser una dama luchadora en el mundo del Medievo Oscuro? ¿Cómo ha conseguido romper el molde del ideal de la feminidad sin perder el sentido de si misma? ¿Se siente complacida o arrepentida por haberle dado la espalda al matrimonio y a la maternidad… o espera poder combinar la vida marcial con la domestica? El jugador que interprete a un personaje masculino debe ser suficientemente astuto como para pensar de antemano cual será la respuesta de su personaje cuando tropiece con una mujer luchadora. Los prejuicios que ha aprendido un hombre en vida permanecen en el, por muy progresista que considere que se ha vuelto tras la muerte. Debéis recordar que para casi todos los mortales y diversos seres inhumanos del mundo del Medievo Oscuro, una mujer que vista la armadura es una novedad que merece un comentario, no algo que deba ser aceptado en silencio, a no ser que el observador sea demasiado mundano para estar harto. Los humanos y aquellos que pasan como humanos corren el riesgo de ser acusados de fomentar la herejía y de comportamiento desviado si se muestran tolerantes con las mujeres que esgrimen espadas ante la presencia de las personas equivocadas.

Las Lamias como Damas Caballeros

En Edad Oscura: Companion se describen diversas líneas de sangre oscuras que todavía existen durante la Edad Media, y una de ellas provoco la formación de las mujeres caballero. Las Lamías suelen Abrazar a mujeres que se niegan a conformarse con sus expectativas sociales. Estas mujeres, hijas de la Madre Oscura Lilith, suelen servir como fuertes brazos diestros para los Capadocios. Son muy temidas y respetadas como guardaespaldas y guerreras. Las Lamías que participan activamente en la lucha pueden tener muchos menos sentimientos conflictivos sobre el hecho de matar, pues adoran a la muerte personificada como Madre Oscura. también cuentan con la ventaja de poseer una jerarquía establecida que fomenta y recompensa las hazañas físicas y que se imite el ejemplo de las mujeres luchadoras admirables.

Un personaje Lamía puede sentirse frustrada si tiene un papel limitado como centinela de un Ladrón de tumbas furtivo y tiene la intención de ser armada caballero. Alternativamente, una Lamía que haya recibido recientemente el Abrazo puede intentar superar el miedo y el disgusto general que siente par la debilidad de su clan, la maldición con la que cargan todas las Lamías, para convertirse en el epitome de la caballería, o puede que desee vengar a Lilith ya todas las de su sexo, destruyendo a los hombres que violan o atacan a las mujeres.

Una mujer anciana que no posea una propiedad importante, que haya quedado viuda o se haya separado de su marido y cuyos hijos sean mayores, puede considerar que es totalmente inútil para la sociedad medieval. Pero la edad tiene mucho menos sentido para los Cainitas que para los mortales, y una mujer que piensa que esta acabada en la vida puede convertirse en un formidable enemigo en la no vida.

¿De quien es esta coraza?

La armadura y las armas no son objetos unisex. Los hombres pueden llevar peso con razonable efectividad cuando se lo distribuyen sobre los hombros, mientras que las mujeres lo llevan mejor sobre las caderas, por lo que una cota de malla pesada que se adapta perfectamente a un hombre puede inmovilizar totalmente a una mujer de la misma estatura. Las manos, muñecas y hombros de una mujer tienen una constitución ligeramente diferente a la de los hombres, de modo que normalmente una mujer guerrera considera que las empuñaduras, asas y puntos de equilibrio de las armas estándar tienen que ser modificados.

Estas reglas no se pueden aplicar a rajatabla… obviamente, no todos los cuerpos tienen la misma forma. Las mujeres pueden y deben compensar las piezas que no se adaptan bien, al igual que muchos de los hombres que no pueden pagarse un equipo hecho a medida. Sin embargo, las personas que busquen detalles auténticos cuando interpreten a mujeres guerreras deberán recordar que hay temas físicos muy reales implicados. Por ejemplo, una dama guerrera puede tener un morado permanente en su muñeca derecha, donde la pesada empuñadura de su espada roza su guantelete cada vez que asesta cierto tipo de golpe. Puede que haya desarrollado la costumbre de girar hacia la izquierda cuando se enzarza en un combate individual, para compensar el vació provocado por un escudo que es ligeramente largo.

Si la mujer guerrera muestra abiertamente que es una mujer y cuenta con personas que desean equiparla (o desean quedarse con su dinero al hacerlo), casi todos los problemas se podrán resolver con un poco de experimentación e investigación. Por otra parte, si esta disfrazada de hombre o no posee dinero suficiente para comprar su nueva armadura, el hecho de utilizar un armadura y unas armas que no han sido diseñadas para ella le provocara diversas rarezas y amaneramientos. El disfraz de hombre implica un conjunto de problemas prácticos concretos. El encubrimiento constante es problemático en una sociedad en la que la soledad se considera una posición anormal y no deseable… tanto las personas que viven en castillos nobles como en cabañas humildes duermen, comen y se bañan juntas, y alguien que decide no hacer lo mismo queda tachado de extravagante.

Existen algunas ventajas posibles para contrarrestar los inconvenientes de ser una mujer guerrera. Diversas mujeres son mas ágiles y rápidas sobre sus pies que sus adversarios masculinos. Como sus caderas giran de una forma ligeramente diferente a las de los hombres, en ocasiones pueden generar una sorprendente cantidad de fuerza en posiciones aparentemente complicadas. El centro de gravedad de una mujer suelen estar mas abajo que el un hombre, de modo que es mas difícil que pierdan el equilibrio o sean derribadas.

Las damas guerreras no son el equivalente de hombres embutidos en una armadura mas pequeña, No es sexista reconocer que existen diferencias en la constitución física de los cuerpos. Trabajar estas diferencias puede proporcionar una experiencia de interpretación realista y detallista.

En Compania Mortal

Las Lamías y otras mujeres Cainitas que toman las armas pueden tener cierta aceptación entre otros vampiros. Sin embargo, si el personaje desea seguir completamente la caballería, se sentirá atraída hacia las cortes humanas en donde nacieron y se desarrollan estos ideales. Allí, la poca comprensión que encontró entre los de su sangre se desvanecerá como la niebla. Una dama caballero desear “hacerlo publico” y aguantar los insultos y los intentos de privarla de las armas, o llevar sus inspiraciones místicas a otro nivel.

Este nivel es el disfraz. Los romances populares entre los nobles y caballeros de toda Europa están repletos de caballeros misteriosos de identidad incierta, de caballeros que solo revelan su nombre a adversarios capaces de derrotarles en la batalla. El nuevo casco grande viserado mantiene oculto el rostro de quien lo lleva, y las cotas de malla combinadas con un relleno acolchado hacen que todas las figuras sean prácticamente uniformes. Totalmente armada y preparada para la batalla, una mujer caballero es totalmente idéntica a un homologo masculino, al menos al simple vista.

En cuanto una mujer caballero adopta el disfraz, debe asegurarse de su personal de apoyo. Solo los caballeros mas pobres tienen que privarse de escuderos y ayudas de cámara; las futuras guerreras deben a bien dejar que sus criados participen del secreto, a bien disponer de un plan infalible para ocultar su verdadera identidad a aquellos que las acompañan en todo momento. Las relaciones señor-vasallo y los juramentos sobre reliquias son de gran ayuda en el ultimo caso. Una propiedad a un castillo aislado también servirá, pues proporcionan a las mujeres caballero un lugar donde entrenarse y practicar sus habilidades en privado.

La corte y las campanas son asuntos totalmente diferentes. Incluso con el desarrollo de algunas instituciones como el scutage, casi todos los caballeros siguen siendo vasallos de alguien, y se le exige que realice un servicio caballeresco en nombre de su señor. La armadura no resulta de gran ayuda para una mujer caballero cuando se trata de cenar en el gran salón o asistir a consejos; tampoco se viste en época de guerra, hasta que el ataque es inminente. Algunas habilidades como Subterfugio pueden ayudar en este contexto, pero incluso a la actriz mas experta le resulta difícil engañar a un buen observador durante demasiado tiempo. Cuenta con la ventaja de que la moda de la corte medieval todavía no ha alcanzado los niveles de exposición que aparecerán en el siglo XIV (cuando las túnicas se hagan tan cortas que no dejaran nada a la imaginación). Un corte de pelo masculino, una túnica holgada y una naturaleza reservada pueden resultar útiles para mantener el disfraz. también el uso creativo de algunas Disciplinas como Ofuscación. Sin embargo, la mayoría de los Cainitas prefieren confiar lo menos posible en sus habilidades Sobrenaturales, pues les preocupan los estragos que puede causar un lapsus momentáneo.

Tiburk

Un amante de los juegos de rol...

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