Las demás órdenes operan en la clandestinidad, y sus miembros, objetivos, métodos y secretos son celosamente guardados de los ojos y oídos de los extraños. La existencia de estas órdenes, no obstante, es ampliamente conocida, aunque sus metes y propósitos suelen ser malinterpretados.
La mayoría de los aprendices Tremens habrán oído hablar de muchas de ellas en uno u otro momento. Un aprendiz, u otro magus interesado en unirse a uno de estos grupos, no necesita más que dar a conocer su interés a unos cuantos amigos. Las palabras viajan rápido, y unos días después, el candidato en potencia es discretamente abordarlo por un representante de la orden. Este magus le estudia cuidadosamente, juzgando su intención y personalidad antes de revelarle su verdadero propósito e invitarle a solicitar la admisión.
Las órdenes secretas siempre requieren del iniciado que formule un juramento de lealtad —un eterno compromiso con los objetivas de la orden— y casi sin excepción prohíben la pertenencia a otra. A pesar de estas prohibiciones, bastantes Tremere se las han arreglado para pertenecer a más de una orden. Los castigos por esta infracción varían según el caso, pero lo más normal es la expulsión de la orden. Más adelante es posible que se imponga algún otro.
La mayoría de estas órdenes tienen una señal secreta por la que un miembro puede reconocer a otro. Suele tratarse de símbolos escogidos, en su mayoría imágenes ocultistas o alquímicas sutilmente alteradas y que sólo los iniciados pueden identificar: una serpiente que guiña el ojo, un cráneo con un diente de menos… etc. Estos símbolos especiales pueden estar bordados en la ropa o formar parte de una joya, de forma que sean irreconocibles para la mayoría de los Tremere que no son miembros de ninguna orden particular.
Sólo los que estén buscando un símbolo específico tendrán muchas posibilidades de encontrarlo. Todas las órdenes secretas afirman ser por completo leales al clan, aunque es frecuente que estén enfrentadas entre sí.
Aparte de la filosofía particular y los objetivos básicos de la orden, los iniciados no suelen saber mucho de ella, su estructura y sus operaciones. Operando en gran medida como el propio clan Tremere, sólo se dice a los miembros lo qué necesitan saber para llevar a cabo la misión que se les encomiende. El ascenso en la jerarquía de la orden lleva consigo un mayor conocimiento del funcionamiento de la misma.
Hermanos de la absenta
Los místicamente inclinados miembros de esta orden comparten regularmente un líquido verde y mezclado con drogas que induce un profundo sueño a la vez que provoca vividas alucinaciones. Algunos afirman que los Hermanos hacen viajes místicos por otros mundos; otros dicen que se limitan a explorar su yo interior. Los mismos miembros de la orden no consiguen ver la diferencia.
Se espera de los iniciados que hayan experimentado los efectos del fluido -una mezcla de sangre humana y otros ingredientes secretos- antes de ser considerados aptos para su iniciación en la orden. Una vez el candidato ha probado su valía, está listo jara la inducción: el iniciado bebe un gran trago del íquido y cae en un profundo sueño que suele durar hasta una semana. Durante este tiempo, sufre salvajes visiones y, si es afortunado, recibe la visita de los maestros secretos de la orden. Estas presencias se le aparecerán en su sueño, revelándole ciertos secretos acerca de la orden.
Al despertar, debe repetir esa información a su contado. Si demuestra que ha sido visitado en sueños por los maestros secretos, es iniciado entre los Hermanos de la Absenta De lo contrario es rechazado, cortándose todo contacto con él. Se rumorea que los líderes de esta orden son adictos al líquido verde y pasan casi todo el tiempo dormidos y soñando. Visitan a sus seguidores en sus sueños y dirigen la orden de esta forma. Los Hermanos nunca se encuentran físicamente sólo en sueños. Los motivos de los maestros no han quedado nunca claros, y parece que el objetiva de la orden sea tambalearse de un lado a otro.
Se cree que los Hermanos han refinado diversas artes mágicas de clarividencia y profecía. Algunos dicen que los maestros secretos son capaces incluso de manipular los acontecimientos del pasado y el futuro.
Los guardianes de la tradición
Una facción de extrema derecha de las Tradicionalistas, esta orden está consagrada a purificar a la Casa Tremeré de los ordenadores y otros instrumentos de alta tecnología en los que muchos magos confían ahora. Argumentando que estas máquinas hacen que la mente se vuelva perezosa, los Guardianes aseguran que recurrir en exceso a ellas debilitará al clan, llevándolo finalmente al desastre.
Hacen campaña activa en contra de la expansión tecnológica, y se sospecha que ocasionalmente han saboteado equipo para demostrar sus teorías. De hecho, un buen número de fallos accidentales han sido erróneamente atribuidos a los Guardianes. Sea como sea, ha quedado claro que los Guardianes de la Tradición son capaces de conjurar espíritus que, una vez sueltos en un sistema Informático, llevan el caos a las bases de datos, poseyéndolas y alterando sutilmente la información mientras el magus trabaja sin sospechar nada, lo que invalida su investigación y hace descarrilar los proyectos. Hay incluso una facción todavía más extremista de este grupo, de convicciones absolutamente racistas y misóginas, que se opone a dar el Abrazo a cualquiera que no se ajuste a sus retorcidos criterios. Aunque son pocos los Guardianes con mucho poder, algunos temen qué esta súper elite esté formada por Señores y uno o dos Pontífices.
Orden de los Naturistas
Esta orden sigue los principios druídicos, afirmando que incluso los Tremere son parte del gran esquema de la naturaleza y deben reconocer su lugar en el mismo. Se dice que adoran, o al menos reverencian, una rama de árbol sagrada de incalculable antigüedad. Se rumorea que un Señor de varias capillas rurales en Irlanda es el líder de la orden. Aunque este magus niega toda conexión con la misma, se sabe que estuvo entre los primeros en saquear la alianza principal de la Casa Díedne tras su destrucción en las Guerras del Cisma entre los años 1003 y 1012. Esta guerra fue promovida por una alianza de las Casas Tremere y Flambeau, y desde entonces se dice que todo fue instigado por los Tremere, que simplemente querían hacerse con una
información específica que obraba en poder de los Díedne.
No hay pruebas, pero se supone que fue esta información lo que llevó a la conversión de los Tremere en vampiros. Se cree que los miembros de esta orden conocen la vieja magia druídica, incluyendo comunicarse con los animales, crear nubes dé langostas y alterar el clima. También se dice que tienen estrechas relaciones con el mundo feérico. Aunque parecen estar fuera de la norma de la magia Tremere, nadie se atreve a actuar contra ellos. En dos ocasiones en que miembros de la orden se han metido en problemas, el
Consejo Interior les ha perdonado. Algunos murmuran que los Naturistas protegen algún gran enigma de tiempos remotos, y otro dicen que guardan el secreto de la inmortalidad Tremere.
Liga Humanus
Ostensiblemente, este grupo está consagrado a la colaboración con los mundanos e incluso la consideración de las metas y esperanzas de la raza humana. Hablan de la necesidad de humanos en el mundo, y de cómo dirigirlos adecuadamente es el deber de los vampiros, y especialmente de los Tremere.
Muchos opinan que el verdadero objetivo de la Liga es descubrir un camino de vuelta a la mortalidad. Se dice que afirman tener un vínculo con el escurridizo Conde de St. Germain, una misteriosa figura que se ha dejado ver por toda Europa a lo largo de los últimos siglos: hay quien cree que es un antiguo Tremere que ha descubierto una forma de escapar al menos parcialmente de la maldición del vampirismo. Los iniciados deben probar su “amor” por los humanos demostrando las buenas obras realizadas, vidas salvadas, desastres evitados… etc. Algunos dicen que, para convertirse en miembro de la liga, hay que renunciar bajo juramento a la sangre: humana, alimentándose sólo de animales a partir de entonces. Otros dicen que sólo los más altos niveles de la orden imponen tal sacrificio.
Se cree que la Liga Humanas ha desarrollado artes mágicas que dan una capacidad parcial para soportar la exposición a la luz solar, así como métodos para saciar el Hambre y mantener controlada a la Bestia. De hecho, al menos unos cuantos miembros de la Liga Humanus han defendido la posibilidad de ayudar a todos los demás vampiros a volverse humanos de nuevo, dejando a los Tremere para gobernar el mundo sin oposición.
Hijos de la Pirámide
Los miembros de esta orden han llevado al extremo la alegoría de la pirámide Tremere. Reverenciando esta forma casi como otros adorarían a un dios, dicen que la Pirámide, tan respetada durante tanto tiempo, ha alcanzado una verdadera realidad espiritual. Los Hijos vinculan el avance espiritual individual a la posición ocupada en la jerarquía piramidal de los Tremere. Predican una ética del trabajo de estilo puritano diseñada, dicen, tanto en beneficio de los intereses individuales como en el del clan en general. Los Hijos dan gran valor a un antiguo volumen, Los Viajes de Fedoso, escrito hace mucho tiempo por un magus de la Orden de Hermes. Interpretan la escalada de Fedoso a la cima de una montaña como una alegoría del logro en el seno de la pirámide jerárquica. Se espera de los iniciados que sean capaces de citar libremente el libro, y ciertos pasajes y acontecimientos deben ser aprendidos de memoria. Pasar esta, primera prueba es esencial para entrar en la orden. Una vez admitido, el trabajo duro es el único camino para mejorar la posición. Si no está trabajando directamente para el clan, el iniciado debe ponerse en contacto con su superior en la orden para que le asigne una tarea. La orden aprecia especialmente a los que son capaces de encontrar y completar sus propias tareas. Se anima a los iniciados, una vez está segura la orden de sus buenas intenciones, a buscar a nuevos miembros y reclutarles para que les ayuden en sus tareas, ensanchando así la base de la pirámide de la orden y ascendiendo al siguiente nivel.
Poco se sabe de las artes mágicas específicas de esta orden. Los Hijas de la Pirámide prefieren trabajar a través de los canales normales para alcanzar sus objetivos. Se dice que los nuevos miembros suelen recibir mejores tareas y asignaciones de la Casa, lo que les permite subir en rango y prestigio con mayor rapidez. Casi nadie duda de que los líderes del cían apoyan a esta sociedad, aunque parece formada sólo por aprendices y Regentes.
Hermandad Iluminada
Llamados a veces Buscadores, los miembros de esta orden creen en una vieja leyenda sobre los llamados “Ancianos”. Se supone que estos Ancianos son antiguos seres de inmenso poder, conocidos para nuestro mundo como los dioses de Grecia y el antiguo Egipto. La Hermandad cree que estos Ancianos volverán algún día para gobernar el mundo, aunque puede que necesiten la ayuda de algunos seguidores.
La mayoría desdeña los postulados de esta orden, diciendo que no son sino unos apenas disfrazados seguidores de aquellos que quisieran sacar provecho de la inminente Gehena. Algunos incluso afirman que son traidores a la Casa Tremere y la Mascarada que pretenden vender a ambas cuando llegue el momento oportuno: estos acusadores señalan los lazos entre la Hermandad y el Arcanum, y al menos un miembro de la Hermandad formaba parte del Arcanum.
La Dorada Senda de la Armonía
Esta orden busca aliviar los conflictos internos del clan. Cuando sus miembros descubren una disputa, actúan como árbitros, encontrando soluciones de compromiso y calmando los ánimos. Forman un grupo de talante más bien inocuo que predica la creencia en la hermandad y la cooperación. Sus miembros son supuestamente elegidos por su tranquila disposición y su actitud desinteresada. Los peores rumores insinúan que la orden es un nido de espías y reclutadores de la Casa Goratrix, aunque no hay ninguna prueba que sustente tal acusación. Algunos llegan al extremo de decir que la orden practica una magia que controla sutilmente las emociones ajenas, y que, tras un largo período de tiempo, sus hechizos pueden ser usados para volver a alguien en contra de la Casa y la Mascarada.
La Élite
Esta orden está estrictamente organizada y se sabe poco de ella. Sus miembros creen firmemente en la superioridad del clan Tremere, y están convencidos de que los demás clanes conspiran para destruirlo. Su desagrado hacia los vampiros de otros clanes y líneas de sangre está al nivel del peor racismo humano. Celebran anualmente la destrucción del Salubri Saulot bajo los colmillos de Tremere, y promueven la idea de que los demás clanes deberían ser tratados de la misma forma. Siguiendo las directrices de los misteriosos líderes de la orden, los miembros operan en secreto contra los objetivos de los demás vampiros, exponiéndoles, revelando sus guaridas e informando a la Inquisición y otros cazadores de vampiros, que descubren y destruyen a Vástagos de la Camarilla. Los defensores de la orden, por supuesto, lo niegan, y se apresuran a señalar que incluso aunque fuera cierto, los rumores de diablerie quedan totalmente fuera de discusión. Se sospecha que la Elite ha desarrollado en secreto diversas artes mágicas para perseguir y destruir a otros vampiros, incluyendo medallones que pueden seguir el rastro de vampiros dormidos y estacas especialmente preparadas para matar. También tienen lazos con la Inquisición, y suelen usar a la Iglesia contra sus enemigos, incluso contra los que pertenecen al clan.
Los Astor
Supuestamente creado por el Consejo Interior, se cree que este grupo ultrasecreto cree la responsabilidad de detectar a traidores y espías en el seno del clan. Como una Inquisición, operan libres de las restricciones de tribunales y otras estructuras legales, respondiendo sólo ante Tremere y el Consejo Interior. Los Astor tienen la facultad de celebrar “Consejos Astor” secretos, donde ejercen su derecho a juzgar sumariamente y ejecutar a los transgresores como les parezca adecuado. Los culpables de crímenes mayores son enviados a Viena para comparecer ante el Consejo Interior.
Esta Inquisición recluta a sus miembros entre las filas de los Tremere, escogiendo sólo a los vampiros que parecen capaces de sobrellevar tal responsabilidad. Se exige un secreto absoluto, y los miembros deben ser capaces de cumplir con su deber sin revelar sus actividades a nadie.
El Ojo de la Serpiente
Esta orden es una de las sociedades más secretas, y sólo vagos rumores corren sobre ella. Parece ser que sus seguidores veneran la forma de la serpiente, a la que consideran como un símbolo de sabiduría. Su símbolo secreto es una serpiente tragándose su propia cola. Circulan historias sobre iniciados tragándose serpientes vivas para convertirse en miembros de la orden. Los siniestros rumores que relacionan a la orden con los Seguidores de Set son categóricamente negados por sus defensores. Aunque se sabe poco dé está orden, se cree que ha desarrollado una gran variedad de rituales que incluyen serpientes y facultades relacionadas con ellas. Supuestamente, los adeptos son capaces de paralizar a un oponente con la mirada, y otros pueden conjurar torrentes de serpientes venenosas que brotan del suelo.
Orden del Wyrm
Esta orden profesa creencias apocalípticas extraídas del Libro de Nod usando un antiguo manuscrito qué le atribuyen los rumores. Este manuscrito, redactado en árabe medieval, se titula Al Azif y se supone que es la obra de un poeta y profeta demente llamado “Abd al-Azrad”. Su libro postula la existencia de un universo mucho más vasto de lo que cree la mayoría. Se cree que al-Azrad pasó años recorriendo como un mendigo desiertos y antiguas ruinas en busca de los secretos que revela su libro: parece ser que en Yemen descubrió la tumba de un antiguo dormido y fue Abrazado allí. En cualquier caso, regresó poco después a Bagdad, donde, a la luz de la luna, escribió su voluminoso libro.
Posteriormente desapareció en circunstancias misteriosas. Aunque es leal al clan, la Orden del Wyrm teme que el dormido Tremere haya sido “reemplazado” por otra cosa… algo que ni siquiera sea un Vástago, algo mucho más poderoso. Viendo en esto una señal de la inminente Gehena, predican la obediencia al Wyrm para evitar un destino más allá de lo imaginable. Se cree que, mediante las enseñanzas del Al Azif, los miembros de esta orden han logrado el acceso a nuevos mundos antiguamente desconocidos para el clan.
Desde allí, han podido convocar y dar órdenes a una hueste de demonios, la mayoría de ellos con nombres casi impronunciables.
La Orden de los Quaesitoris
Algunos creen que los Quaesitoris fueron proscritos por el Consejo Interior y viven ahora en la clandestinidad; no ha quedado claro si los Quaesitoris existen de verdad o no son más que un rumor. Actúan como jueces y verdugos independientes, eliminando a los magi Tremere cuyos superiores consideren indignos de su posición. Se les considera un peligro supremo para la Casa, y ha habido esfuerzos de todo tipo para acabar con ellos. La orden tiene sus raíces en los Quaesitoris de la vieja Orden de Hermes. Antaño los intérpretes de los códigos y leyes del clan, su presencia era requerida en todos los tribunales. Los Quaesitoris originales eran miembros de una Casa específica, pero con la caída de la Orden y el auge de los vampiros Tremeré, algunos de ellos fueron asimilados por éstos.
El iniciado jura obediencia a un Código Quaesitor especial que le vincula a la Orden, y promete cumplir siempre sus funciones en la mejor tradición de los Quaesitoris, acatando el viejo Código de Hermes, que consideran que tiene prioridad sobre el de Tremere. Unirse a la Orden de los Quaesitoris es una decisión para toda la eternidad, y la pertenencia a cualquier otra orden interna está estrictamente prohibida. La violación de cualquiera de los principios de la Orden suele ser castigada con una sentencia de muerte.
Hay todo tipo de rumores sobre la Orden de los Quaesitoris, incluyendo preocupaciones sobre su infiltración por magos, peones del Inconnu y otros poderes. Dado que operan por encima y por fuera de la ley de los Tremere, cualquier sospechoso de ser un Quaesitor es inmediatamente enviado a Viena para una audiencia ante el Consejo Interior.